Comunicadores de nuestro medio, fueron testigos de la mala atención de la firma Tigo, agencia San Lorenzo, la denuncia concreta es referente a la burocracia interminable, a la hora que el usuario quiere cancelar el servicio de la referida empresa.
El afectado primero procede al pedido de cancelación vía telefónica, en fecha 15 de octubre del corriente; el motivo fue por el cambio de domicilio y en esa ocasión la operadora, le manifiesta al usuario que le estarían llamaran por teléfono para proceder a la cancelación definitiva, cosa que nunca ocurrió; razón por la cual en fecha 01 de noviembre el afectado se presentó en la agencia Tigo de San Lorenzo, donde le pidieron cancelar una factura pendiente y le dijeron que le llamarían para la cancelación del servicio, pero nunca llamaron.
Nuevamente el afectado acude a la agencia en fecha sábado 12 del corriente, donde se encuentra con una deuda que fue abonada en su totalidad, que se acumuló debido a la inoperancia de dicha empresa. El representante de Tigo prometió que le llamarían para la baja definitiva del servicio, cosa que no se dio de nuevo, además al solicitar factura y estado de cuenta impreso, se negaron a emitir, manifestó la víctima.
El servicio no se usa desde el mes de octubre, porque el usuario cambio de domicilio, pero la burocracia de esta empresa que implementa un tedioso protocolo para la cancelación del mismo, hace que la deuda se siga acumulando a pesar de no usar dicho servicio.
Hasta cuando este gobierno permitirá que los usuarios y consumidores seguirán siendo víctimas de este tipo de abuso?.
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